De la mano del maestro Flugel, recorremos las diversas etapas del desarrollo demográfico, social y crecimiento estructural a lo largo de la historia.
Para cerrar el año 2023, y luego de decenas de columnas enfocadas en la vida de la frontera, su sociedad, cultura y arte, he resuelto destacar la historia de la ciudad de Chuy, la cual hace una década me recibió y acogió como lo hacen todas las fronteras, sin cerrarle las puertas a aquellos que tienen la capacidad de entenderlas, adaptarse y construir comunidad con los referentes locales.
En esta oportunidad quiero compartir el trabajo de recopilación y conservación del patrimonio local llevado adelante por el maestro jubilado Ruben Felix Flugel, quien siguiendo su vocación de investigador y de hombre interesado en la historia del lugar donde ha vivido por décadas, y con el aporte de otros incansables colaboradores, hoy ofrece para el disfrute de todos lo que tengan interés en saber, una muestra fotográfica e histórica en las oficinas del Municipio de Chuy, en Rocha.
Visitamos esa muestra, extrajimos imágenes que compartimos con ustedes y entrevistamos al protagonista, procurando cerrar así de la mejor forma esta etapa de aportes desde la frontera con una perspectiva personal, siempre esperanzados en que un día los fronterizos asumamos las particularidades de nuestra identidad de tales y reivindiquemos a nivel nacional e internacional el reconocimiento de esas características, tan peculiares como únicas.
Flugel nos contó sobre sus orígenes y sobre el nacimiento de esa vocación por la historia local, que lo ha llevado a volverse un referente de importancia para la comunidad fronteriza de Chuy. De igual modo, discurrió en detalles de cómo se fue formando ese “banco de imágenes” que hoy conforman la muestra histórico-fotográfica que presenta en el Municipio de Chuy.
De sus palabras se desprende que, en determinado momento, el Chuy fue casi avasallado por extranjeros y nacionales, que viniendo en busca de una forma de vida particular como la que se da aquí en la frontera, llegaron a superar en número a las primeras familias fundacionales del poblado.
Pero siempre estuvo marcado por la cultura fronteriza, parte legal y parte ilegal: “el fenómeno del contrabando es común, se da en todos los lugares del mundo pero se da en las fronteras, y aquí no ha sido un fenómeno ajeno a esa característica de las fronteras”.
Él entiende que, si bien ha variado en algunos aspectos desde cuando era apenas un núcleo poblado, en que los guardias civiles o aduaneros salían a perseguir a las comparsas con caballos y había enfrentamientos a tiros, hasta lo que es hoy día, donde existen otros tipos de controles, la evasión continúa existiendo.
“Los contrabandistas de antes lo hacían a lomo de caballo; hoy día bien sabemos que el contrabando pasa por otros lugares, y se evade de otra manera”
Obviamente que cuando hablamos de esto no estamos haciendo apología del contrabando y del delito; es una lectura de una forma de vivir, de la realidad social, cultural y económica de la vida en la frontera “porque existe algo que es evidente: la diferencia de precios, siempre, entre uno y otro país. En invierno venían los brasileños, porque había productos que se ofrecían acá, o que eran propios de una época que eran tentadores para ellos; pero en el verano, éramos los uruguayos que íbamos al lado brasileño a comprar, porque se ofrecían otros tipos de productos”.
Flugel entiende que podría existir un verdadero libre comercio, una libertad de pasaje de bienes y servicios como existe en países europeos, por ejemplo; pero considera que además de la variedad de productos que se ofrece de un lado y otro de la frontera, que son típicos de cada lugar (como la banana, el ananá de Brasil, y la carne, la leche o la lana, de Uruguay), está el tema de la diferencia cambiaria “porque es muy difícil que las monedas estén equilibradas”.
Es en este escenario que el entrevistado considera difícil que esto se acabe o sufra cambios bruscos; en su opinión, ante la actual coyuntura social es difícil de prever que el desarrollo acompañe el crecimiento demográfico vertiginoso que está por venir, similar a los ocurridos en épocas pasadas, donde la infraestructura política y gubernamental no pudo acompasar la evolución de la comunidad cuidando del bienestar de la población.
“Este crecimiento ha ido eliminando el patrimonio edilicio y cultural, lo que se hace perceptible en esta muestra, donde se ven edificios que fueron emblemáticos y que ya no existen, salvo el local de la receptoría de Aduanas, y alguno que ha quedado metamorfoseado debajo de algunas construcciones modernas, porque todo se ha derrumbado y se han construido cosas nuevas”, lo cual a su entender también es una pérdida del patrimonio local aunque, al menos para consuelo, puede ser redescubierto en imágenes.
Por todo ello, extendemos a ustedes la invitación a visitar la muestra histórico-fotográfica instalada en el hall del Municipio de Chuy, abierto al público durante todo enero 2024, en el horario de 8:00 a 13:30 horas.
Produtor e documentalista, investigador, escritor, jornalista e amigo da natureza.